Una científica trabajando en su laboratorio

Importante avance científico para frenar la resistencia a la terapia contra el cáncer

Un estudio identifica una estrategia para evitar la resistencia a la terapia contra el cáncer

Un trabajo del Vall d'Hebron Instituto de Investigación (VHIR) y de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) ha descifrado un nuevo mecanismo para sensibilizar a las células cancerosas respecto a una terapia específica que hasta ahora no ha resultado efectiva debido a la resistencia de los tumores. En los últimos años se han estudiado múltiples terapias contra el cáncer que no han logrado llegar a la práctica clínica. Es el caso de las moléculas TRAIL, que a pesar de tener buenos resultados en fases preclínicas, no han mostrado la eficacia esperada en los ensayos clínicos por la resistencia que presentan las células tumorales. Esta investigación ha revelado el mecanismo molecular por el que las células se vuelven resistentes a la acción antitumoral de TRAIL.

Los resultados, que han sido publicados en la revista 'Cell Death & Disease', se han realizado en colaboración con el grupo de Investigación Biomédica en Ginecología del VHIR, el IRB Barcelona y el Hospital del Mar Research Institute. Sergio Espinosa, investigador del VHIR y de la UAB y primer autor del estudio, ha remarcado que estas terapias son "muy prometedoras", ya que los receptores de TRAIL se localizan principalmente en las células cancerosas, pero no en las células células sanas y, por tanto, “minimizarían los efectos secundarios en las demás células”.

El estudio actual muestra que la proteína kinasa ERK5 juega un papel relevante. En estudios previos, ya se había demostrado que ERK5 está involucrada en la proliferación celular y la supervivencia del cáncer. Ahora se plantea que la activación de esta proteína también confiere resistencia frente a tratamientos que producen la muerte de las células.

Buenas sensaciones tras los resultados

Los resultados muestran que la inhibición de ERK5 con fármacos restaura la sensibilidad de las células en los tratamientos antitumorales. Los investigadores proponen administrar inhibidores de ERK5 para mejorar la eficacia antitumoral de los agonistas de TRAIL. También los inhibidores ayudarían a potenciar la actividad de las células NK, un tipo de células inmunitarias que poseen una potente acción antitumoral, en parte debida también a la activación de la vía de TRAIL. Hasta ahora, el análisis se ha llevado a cabo en líneas celulares de diferentes tipos de tumores sólidos, como cáncer de próstata, pulmón, cervical o neuroblastoma, y ​​en cultivos 3D u organoides derivados de pacientes con cáncer de endometrio. En el futuro, los investigadores esperan encontrar nuevas colaboraciones para realizar ensayos clínicos, con el fin de probar los inhibidores de ERK5 en pacientes oncológicos.