El Barça vivió otra pesadilla europea con la eliminación a manos del PSG en un encuentro en el que los culés acabaron cayendo por 1 gol a 4. La expulsión de Araujo con roja directa en el minuto 29 acabó condicionando un partido en el que los franceses impusieron su superioridad encima el verde del Luís Companys.
A pesar de que el Barça se adelantó primero con una magistral jugada de Lamine Yamal que remató a puerta Raphinha, las esperanzas culés se desvanecieron con la expulsión prematura de Araujo y la remontada de los parisinos que con 1 a 3 vieron como el Barça buscó el gol de la igualada en la eliminatoria y que Mbappé lo acabó de dinamitar con el definitivo cuarto tanto en el minuto 89.
Dembélé, foco de las críticas de los aficionados
Uno de los jugadores en el que el aficionado culé puso el foco de atención desde el primer momento fue en Ousmane Dembélé. El extremo francés volvió a marcar, el empate a 1, y celebró con rabia los goles con sus compañeros. Como ya hizo en la ida, el aficionado blaugrana no se lo perdonó.
Antes del partido buena parte de los aficionados del Barça mostraron billetes con la cara de Dembélé o su rostro con una nariz de cerdo, por el hecho de haber dejado tirado el Barça después del esfuerzo que hizo el club apostando por él a pesar de sus reiteradas lesiones y desordenes fuera del campo.
También se pudo ver algunos aficionados quemando la camiseta de Dembélé, que en Can Barça se lo trató a nivel de estrella siendo uno de los jugadores más bien pagados y que, a pesar de llevar a cabo algunos actos de rebeldía, Xavi Hernández acabó apostando por él.
Pero una de las imágenes más cómicas del partido la protagonizó el exdelantero del Barça cuando en una jugada en la banda piso sin querer el balón y se resbaló él solo, lo que encendió la risa y burla de todos los aficionados presentes en el Lluís Companys.
5 años sin llegar a semis de Champions
Con la eliminación de ayer, el Barça ya acumula 5 temporadas sin pisar la penúltima ronda de la Champions League, en un partido que la expulsión de Araujo llevó a remolque al equipo que fue incapaz de reaccionar hasta en los minutos finales.
Además, la expulsión del central uruguayo acabó con el sueño europeo del Barça y conllevó la salida de Lamine Yamal, el jugador más diferencial ahora mismo del Barça, y que notó mucho la falta de producción ofensiva ya que en su lugar tuvo que entrar Íñigo Martínez para seguir manteniendo el marcador de la eliminatoria favorable al Barça, así como seguir jugando con 4 defensas como al principio.
El Barça sufrió la tercera derrota en 10 partidos a manos del PSG, y cierra una Champions League con un balance de 6 victorias, 1 empate, y 3 derrotas, habiendo anotado 20 goles y recibido 14. Una temporada más el Barça cierra el talón europeo con la sensación de que ante los grandes le sigue costando competir y que le tiene que servir para que desde el club se siga trabajando para poder armar un equipo más competitivo de cara al próximo curso.