La carretera N-II ha vuelto a ser escenario de una tragedia mortal, esta vez a la altura de Campdorà, en Girona. La vía, conocida por su peligrosidad y gran volumen de tráfico, ha sido nuevamente el centro de un accidente con consecuencias fatales. En la tarde del 18 de octubre, un accidente entre un camión y dos turismos ha dejado un balance de una persona fallecida y varias heridas. Este siniestro se suma a una preocupante serie de accidentes recientes en las carreteras catalanas, lo que pone en el punto de mira la seguridad vial en el país.
El accidente ha tenido lugar en el punto quilométrico 721,4 de la N-II, a la altura de Campdorà, y ha provocado el corte de la vía en ambos sentidos, afectando a cientos de conductores y generando largas retenciones. Según información facilitada per Trànsit, el siniestro se ha producido poco después de un las cinco y cuarto de la tarde, cuando un camión y dos turismos se han visto implicados en un violento choque. El conductor de uno de los turismos ha perdido la vida a causa del impacto, mientras que el conductor del camión ha resultado herido y el del segundo turismo ha salido ileso.
En la imagen proporcionada por la cuenta de Twitter Anti-radar Catalunya, se puede ver cómo el camión azul ha quedado con la cabina visiblemente dañada, mientras que otros restos de vehículos se encuentran esparcidos por la carretera. Los servicios de emergencias, entre ellos varias patrullas de los Mossos d'Esquadra, cinco dotaciones de los Bombers de la Generalitat y unidades del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM), se han desplazado al lugar del siniestro para atender a los heridos y asegurar la zona. También se ha movilizado un helicóptero medicalizado debido a la gravedad del accidente.
El choque ha obligado a cortar la carretera N-II en ambos sentidos, en un tramo de aproximadamente siete kilómetros, lo que ha generado grandes problemas de circulación y retenciones que han alcanzado incluso a la C-65, a la altura de Quart. La investigación sobre las causas del accidente sigue en curso, y los Mossos d'Esquadra están trabajando para esclarecer qué pudo haber llevado a este trágico desenlace. Aún no se descartan factores como un error humano, el estado del vehículo o incluso las condiciones de la carretera.
Este tipo de accidentes recuerdan la peligrosidad de algunas de las principales vías de Catalunya, especialmente en tramos como la N-II, que ya ha sido escenario de numerosos siniestros en el pasado. En las últimas semanas, se han registrado varios accidentes de gravedad en las carreteras catalanas, como el ocurrido en la AP-7, donde un choque múltiple también dejó varias personas heridas y provocó importantes retenciones. La combinación de un elevado tráfico de vehículos pesados, la alta velocidad y ciertos tramos con condiciones complicadas hace que la N-II sea una de las carreteras más peligrosas de Catalunya.