Montage en el que sale Aymeric Laporte en el centro con una redonda abajo a la izquierda del encontronazo con Vinicius, y una redonda arriba a la derecha con Vinicius Junior

Aymeric Laporte hunde a Vinicius con solo 3 palabras

El central español tiró de ironía para referirse al encontronazo con Vinicius

El partido entre España y Brasil en el Santiago Bernabéu empezaba con un reclamo de acabar con el racismo en los estadios de fútbol. Una proclama que el jugador del Real Madrid, Vinicius Junior, ha ido haciendo bandera los últimos tiempos. Más allá de las malas conductas y provocaciones hacia los rivales del extremo brasileño, Vinicius se ha querido vender siempre como una víctima que sufre la persecución de los demás.

La realidad es que no hay partido donde el delantero madridista no tenga una actitud de irreverencia ya sea hacia los jugadores rivales, la afición o los propios árbitros. Pero el amparo mediático que tiene Vinicius es de tal magnitud que a pesar de sus insultos y agresiones, más que documentadas, aún no ha sido expulsado de un partido de fútbol. Y no será por las papeletas que ha comprado desde su llegada a la capital española.

Laporte hunde a Vinicius con mensaje directo

Una de las víctimas del genio de Vinicius en el partido que disputaban ayer las selecciones de España y Brasil en el Bernabéu fue el jugador del Al-Nassr de la Arabia Saudí, Aymeric Laporte. El central español se vio sorprendido por Vinicius cuando estaba defendiendo un córner, cuando el brasileño le propinó un empujón por la espalda sin venir a cuento. Acto seguido, Laporte le recriminó la acción y Nico Williams tuvo que ir a separarlos en una trifulca más del brasileño.

Una vez concluido el encuentro, Aymeric Laporte lanzó un mensaje en sus redes sociales donde se veía el momento en el que se le acercó Vinicius para empujarlo, a lo que el ex zaguero del Athletic Club afirmó: ''Quizá quería bailar...?'' acompañado de 3 emoticonos donde se reía de la acción polémica.

A pesar de que Vinicius fue sustituido en el minuto 71 y ovacionado por la grada del Santiago Bernabéu, el madridista fue el foco de otra bronca que se originó al final del match y en la que se vieron involucrados Álvaro Morata y el seleccionador Luis de la Fuente. Por suerte, la situación no fue a mayores y los ánimos se acabaron sosegando cuando los futbolistas se fueron hacia los vestuarios.