Muy probablemente no son el foco principal de atención de este Barça, con Aitana, Alexia, Rölfo, Hansen y compañía, pero lo que sí es cierto es que el Barça femenino tiene una pareja de centrales incombustible que tanto dentro como fuera del campo se entienden a las mil maravillas.
Buena parte del éxito logrado el pasado sábado en el nuevo San Mamés ante el todo poderoso Olympique de Lyon, es en buena medida por el tándem que forman en defensa la aragonesa Mapi León y la internacional noruega Ingrid Engen.
La reconversión a central
Pero si hay algo de particular en esta perfecta pareja es que ambas de origen no eran centrales. Engen llegó al Barça la temporada 2021/2022 procedente del Wolfsburgo como medio centro, que es la posición en la que siempre había venido jugando y que la catapultó al fútbol alemán y a la selección con su explosión en el Rosenborg noruego.
Mapi León, por su parte, jugaba en sus inicios en el entonces Prainsa Zaragoza, equipo de su tierra, como lateral zurda. Una lateral muy completa en ataque como en defensa. Pero su fichaje por el Atlético de Madrid la acabó ubicando en el central y que ya no ha dejado hasta día de hoy.
Mapi ya es una de las veteranas del Barça, y es que a sus 28 años ya acumula 7 temporadas en el Barça, y cabe resaltar que este ha sido un año complicado para ella ya que sufrió una rotura del menisco externo de su rodilla derecha y que la obligó a someterse a tratamiento quirúrgico. Mapi, ha estado en el dique seco la mitad de la temporada, pero ha podido terminar estando disponible para el técnico Jonatan Giráldez para los 2 partidos de liga intrascendentes que le quedan a las culés.
Un año más de azulgrana
La central noruega Ingrid Engen tiene contrato hasta junio de 2025 con lo que el año que viene, el Barça tendrá de abordar su prolongación ya que ha sido una de las centrales indiscutibles en el esquema de Jonatan Giráldez esta campaña. Engen se ha erigido como la líder de la zaga culé con 21 partidos disputados.
Mapi, que amplió hace unos meses su vinculación con el Barça, vestirá la elástica culé hasta junio de 2026 cuando tenga 30 años, siendo una de las piezas fundamentales en el esquema del nuevo técnico azulgrana. Su jerarquía, carácter competitivo, y calidad con la salida de balón la hacen una de las mejores centrales del mundo que, junto con su inseparable pareja, Ingid Engen hacen uno de los mejores tándems de Europa.