Perro mirando por la ventana con las patas delanteras apoyadas en el marco.

El consejo de un veterinario en caso de sacrificar a tu mascota: 'Debes...'

Afrontar esa situación es muy complicada para todos

Tener que dejar y ver morir a tu mascota porque no se puede hacer nada por salvar su vida es uno de los episodios más duros a los que nos podemos enfrentar. Pero, en estas situaciones, no somos los únicos que sufrimos. En muchas ocasiones, en los hogares suelen habitar más de un animal y entre ellos establecen también una relación de mucha unión.

Evidentemente, estos compañeros animales no son conscientes de lo que está ocurriendo cuando tenemos que sacrificar a uno de sus compañeros. Y, por eso, un veterinario que publica consejos en sus redes sociales ha explicado que lo mejor que podemos hacer es enseñarles el cadáver de la mascota sacrificada. Si no lo hacemos, defiende, les invadirá una incertidumbre constante de qué le puede haber ocurrido a su colega; de esta forma también pasan el luto, pero al menos ya son conscientes de todo.

"Cuando algún peludo que guardara confianza con otro peludo de la casa fallece,  debes enseñárselo para que vean que efectivamente ha fallecido y que no se ha perdido o le ha pasado nada malo. De esta manera, ellos interpretarán a la perfección que ese animal ha fallecido y si es cierto que pasarán su luto y su pena, pero serán conscientes de lo que ha ocurrido. De la otra manera tendrán una incertidumbre de qué ha podido pasarles. Enseñádselos para que se queden tranquilos", exponía en su vídeo. 

¿Cómo pasan el luto los perros?

Cuando un perro muere, es común que los otros perros en casa experimenten un proceso de duelo similar al de los humanos. Los canes pueden mostrar señales de tristeza, desorientación o pérdida de apetito. Esto ocurre porque los perros forman vínculos emocionales profundos con sus compañeros y la ausencia de uno de ellos puede generar un cambio en la dinámica familiar.

Algunos comportamientos típicos de duelo en los perros incluyen buscar al compañero fallecido, dormir más de lo habitual o, por el contrario, estar más inquietos y nerviosos. También pueden mostrar falta de interés por actividades que antes disfrutaban, como los paseos o los juegos.

Para ayudar a un perro a superar el duelo, es fundamental darle tiempo para adaptarse, ofrecerle apoyo emocional y mantener una rutina estable que le proporcione seguridad. Incluir nuevos juegos o paseos más largos puede ayudar a distraer al perro y mejorar su estado de ánimo. Además, es recomendable no introducir a otro perro en la familia de inmediato, ya que el proceso de duelo necesita tiempo y respeto para que el perro pueda adaptarse adecuadamente a la pérdida. Cada perro es único y su forma de gestionar el luto puede variar, por lo que es importante estar atentos a sus necesidades emocionales.